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No puedo explicarles lo que sentí ayer. Las palabras no me alcanzan para describir este sentimiento tan desbastador. Se me caían las lágrimas, porque no puedía entender cómo llegamos hasta acá.

Desmoralizados, desanimados, sin fuerzas... Golpe tras golpe estamos sufriendo pero seguimos ahí, cada derrota duele más pero seguimos de pie. La cancha se sigue llenando pero el dolor es cada día más intenso.

Miraba a mi alrededor y no salia de mi asombro, es tan fuerte ser hincha de Central que aun en las peores estamos todos. Y se que las elecciones pueden dividirnos ideologicamente, pero ayer la tristeza era compartida, el dolor nos caló muy profundo.

El 4 a 1 no fue la catástrofe, sino todos los tropezones que venimos dando, ni una nos sale. Estamos cagados por un vagón de elefantes (perdonen la mala palabra pero no hay otra frase que describa mejor esta situación).

Yo no se que hicimos para merecer todo esto, en que nos equivocamos tanto. Porqué a nosotros?

A ustedes les digo, los únicos responsables de esta debacle, la vida da vueltas y algún día cuando menos se imaginen, y mientras la justicia nos de la espalda, todo eso que hicieron se les va venir en contra. No se cuando será pero sera.

Que el dolor no opaque la conciencia y mañana despertemos con la claridad de elegir lo que nos conduzca a la gloria.