No hay mal que por bien no venga

Antes cuando pensaba en todo lo que nos faltaba para terminar con este calvario, ni sospechaba lo que nos podía deparar el destino.

Les juro que aun sigo rezando y mirando al cielo suplicando a quien sea un poco de ayuda. Les juro que hago todos los partidos lo mismo.

Sinceramente la pase muy mal, sufría demaciado y soy cociente que aun el torneo no ha acabado. Tan solo queda un último suspiro.

Se me llenan los ojos de lágrimas de pensar que todo lo que soñamos este año se está cumpliendo...

Les pido a los jugadores que hagan el último esfuerzo porque el objetivo esta ahí, a la vuelta de la esquina. Ya lo podemos acariciar.

Mañana voy estar como siempre, con las mismas cábalas de todos los partidos, con los mismos nervios de cada encuentro, con la misma pasión que me enseño mi viejo.

Estoy convencida que todo lo que nos ha pasado nos sirvió para crecer. Como me dijo mi amiga, Susi, "Toda crisis es oportunidad". La verdad es que no se equivocó.